Santander sin agua

Son las 18:00 horas y bastantes zonas de Santander siguen sin agua corriente. Es decir, 24 horas después de la rotura de una tubería y la concatenación de disparates uno detrás de otro sigue sin poder arreglarse. La gente cocinando con agua mineral, sin ducharse ni lavarse, sin ir al baño -o haciéndolo en bares y cafeterías-, etc. Vamos, un completo y absoluto desastre que deja bien a las claras el sistema de conducciones de agua que hay en la ciudad. La zona Castilla-Hermida, con las tuberías nuevas, parece que aguanta de momento el golpe. Antiguamente el servicio era municipalizado -SEMAS- y como eran funcionarios cada uno hacía lo que le venía en gana, y una persona podía estar 5 años sin pagar el agua que no se lo cortaban -esto es verídico-. ¿A costa de quién era aquello? Pues de todos los ciudadanos de la ciudad, que pagaban anualmente sus impuestos por ese bien. Cambiaron las cosas y ahora es Aqualia -empresa privada- la que se encarga de ello, pero, como es lógico, no pueden cambiar todas las tuberías de Santander por muy mal que estén, que parece que así es. Nadie se preocupa de estas cosas hasta que pasa algo grave y nos damos cuenta de que todo está pillado con alfileres, y, a veces, ni siquiera. Lo de la teoría del caos no parece tan descabellada y sólo hay que imaginarse -en la Jungla 4.0 se habla de ello- si nos quedásemos a la vez sin agua, sin gas y sin electricidad. Pero lo de aquí es otra cosa diferente. Se llama chapuza.