La flota de cerco de Cantabria permanece desde el viernes amarrada a puerto para reclamar a la Secretaria General de Pesca que revele qué planes tiene para el sector y le conceda ayudas para compensar las pérdidas provocadas por la veda de la pesquería de anchoa. Los pescadores de Cantabria se han sumado así a los paros que secundan desde el lunes las flotas de Guipúzcoa y Vizcaya y esperan que amarren los asturianos y los gallegos, según ha explicado el presidente de la federación cántabra, Manuel Vinatea.
Está claro que, pese a lo mucho que promociona Revilla las anchoas de Cantabria, el sector vive un periodo de "incertidumbre" y los pescadores cántabros amenazan con salir a pescar pese a la veda.
Si nuestro presidente ya culpaba de la subida del precio de la leche a los chinos que ahora se han aficionado a desayunar con el fruto de las vacas, habrá que ver a quién se culpa ahora del problema de las anchoas. Quizá algunos, utilizando su misma lógica china, culpen al presidente de dar tanta promoción a las mismas.
2 comentarios:
Se las habrá comido todas Buenafuente!
Las anchoas es un gran problema, con lo que a mi me gustan. El problema del mar va a ser considerable en un futuro no muy lejano, habra que ir guardando suministros y luego como Fry en Futurama!
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