Adiós Bush, hola Obama

Lo principal del titular es lo de adiós Bush, el presidente estadounidense más patético de los 43, incluidos él, que han ocupado el 1.600 de la Avenida de Pennsylvania. Su gestión ha sido garrafal y llegó a la Casa Blanca con la sombra de la sospecha cernida sobre su cabeza tras un más que polémico recuento de votos en Florida, estado gobernado por su hermano Jeff -el de la República de España...-. ¿Y después? Nada de nada en 8 años. Deja el mundo mucho peor y más inseguro que cuando él llegó. ¿Ha hecho algo bueno en ese tiempo? Seguramente, pero nadie lo sabe. Le vino de perlas el 11-S -todavía hay una espesa niebla sobre el caso- para lanzarse en una calculada estrategia que tenía como primera parada Afganistán pero con Sadam Hussein, ex aliado norteamericano, como objetivo final. Se saltó a la ONU y a todo el que se puso por delante para cumplir con los que financiaron su carrera presidencial -petroleras- y montar la mundial en Irak. Anunció la victoria demasiado pronto y el crédito se le acabó poco después. Ahora, los americanos saldrán de allí como lo hicieron de Vietnam... pero con miles de muertos yankis a sus espaldas. Y esto sin hablar de la crisis creada por su total incompetencia y descontrol económico. Adiós Bush. Y hola, Obama, muchas esperanzas depositadas, que esperemos que no te sepulten. Tu cuaderno en blanco se estrena ahora. Suerte.