miércoles, 18 de febrero de 2009

El minicarnaval de Santander

Toca hablar de nuevo de Santander para contar que una ciudad candidata a ser capital cultural europea en 2.016 va desaprovechando ocasión tras ocasión para demostrar que es capaz de hacerse con ese título. La última tiene que ver con el carnaval. Más bien con el minicarnaval. Mientras que en la mayoría de lugares con mayor tradición en estas fiestas las actividades duran unos 10 días, aquí han decidido darles matarile en 3. Viernes, sábado y domingo. Para ello, se ha encargado la construcción de una carpa en la Porticada -¡qué raro!- donde desfilarán las diferentes asociaciones, peñas y comparsas. El concejal del ramo, César Torrellas, ha hablado, incluso, de que el recorrido por su interior va a ser "a modo de sambódromo". Momento para el descojono. Creo que es como comparar un futbolín de bar con el estadio Maracaná, además de un insulto para la inteligencia de los ciudadanos, que ya no les dan gato por liebre. Se nos dijo que se construía un palacio de exposiciones para erradicar las feas y cutres carpas, pero lo cierto es que me da la sensación de que hay ahora más que antes. En definitiva, me parece que los ciudadanos de Santander se merecen algo más para no convertir, como siempre, la ciudad en un solar el fin de semana de carnaval. Aunque, eso sí, también creo que cada uno tiene lo que se merece, y una ciudad muermo es difícil que tenga mucha fiesta.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Pero de verdad cres que esta ciudad tiene la mas minima posibilidad de ser capital cultural europea? ¿Donde puñetas esta la cultura aqui? ¿en el palacio de la magdalena? ¿en el tenis? ¿el club parayas? no se ni como se han atrevido a presentarse.

Anónimo dijo...

Lo del carnaval de Santander es otra manifestacion cultural de als de Santander. SI no se han esmerado este año, nos damos por perdidos ya... TODOS A LAREDO Y A SANTOÑA!!

Anónimo dijo...

Pues a toro pasado podemos decir que el Carnaval de éste año en Santander ha sido el mejor de su historia. Poco a poco van haciendose las cosas bien.