Misses y Missos

Después del huracán -mediático y del otro- de este fin de semana, no quería dejar pasar la oportunidad de hablar de los concursos de Misses y Missos, o Místers o como se quieran llamar. Se han celebrado recientemente los certámenes de Miss y Míster España y el resultado, la verdad, es lo de menos. Nunca me han gustado porque me parece que es patético el show que se monta para enseñar a hombres y mujeres en bañador y en otras prendas. No favorece en nada ni a unos ni a otros y, además, algunos y algunas estarían mejor en su casa viéndolo por la tele que participando. Está bien aquello de no tener complejos, pero de ahí a algunas cosas que se ven, debería ir un trecho, sobre todo si tenemos en cuenta que es un concurso de belleza. Denigran a ambos y van perdiendo a pasos agigantados el "caché" que tuvieron en algún tiempo. Ahora se han convertido en algo casposo y poco seguido, prueba de lo cual es que el de Míster empezó a la 1:15 de la madrugada, nada menos. Creo que cada vez tienen menos solución de continuidad, pero está claro que mientras algunos y algunas vean la posibilidad de hacer carrera en televisión presentándose a este tipo de concursos, seguirán teniendo participantes. Cuando se hace Miss y Míster Cantabria se ve la clase de gente que se presenta. Hay quien se apunta sólo para vacilar y denostar, un poco más, algo que ya de por sí tiene muy poco valor.