miércoles, 8 de octubre de 2008

Misses hasta en la sopa

Esta vez no es obra de Juan Carlos Flores. Igual está de vacaciones. Es lo de menos, lo que importa es que ya han salido varias noticias de nada e, incluso, repetidas, sobre algo que cada vez tiene menos fuerza: el concurso de Miss y Míster Cantabria. No hace mucho que se habló aquí de él pero hoy vuelve a salir en El Diario y ya harta un poco ver tanta caspa, aunque en el propio texto, del que recomiendo su lectura encarecidamente -ironía-, se citen esa palabra pero con el objetivo de evitarla. Difícil lo tienen, la verdad, porque huele desde lejos. Hablan de "industria millonaria" pero creo que no se refieren a Cantabria. En el artículo se habla de "tris", "celebrities" y "palmito", entre otras lindezas. Lo de celebrities no sé por quién lo dirán porque de los que salen en la foto, ni Miss España 2008 se salva de la quema, que la ves por la calle y no llama nada la atención. El glamour se perdió hace tiempo y la gente ya está un poco hasta las narices de estas chorradas a las que no se presentan ni las más guapas-os ni mucho menos. Se apuntan los y las que se apuntan y así queda luego el concurso. Por ejemplo, Sandra Veiga, última Miss Cantabria, no entraba en las medidas perfectas ni de lejos y el hecho de ser madre, en contraposición con la polémica del año anterior de Ángela Bustillo, la ha podido ayudar. Eso sí, no ha podido pasar por caja tanto como lo hizo la Bustillo, que se buscó la vida muy bien, la verdad. En definitiva, ese "halo casposo" al que se refiere el texto es difícil de quitar y lo de recuperar prestigio ya ni os lo cuento porque creo que esto sólo va para abajo. Y de potenciar la imagen de Cantabria creo que poco, tirando a nada, porque no pasamos de concursillo pueblerino con familiares y poco más.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Tuve la "suerte" de poder asistir a esto y la verdad es que... no se presentan las mas ni los mas guapos. Es sí, esta vez al menos la cosa estaba bien orgnizada y fue bastante agradable de ver, no como la basurilla de la moda del mes pasado.