Seguramente a casi nadie le haya preocupado, pero lo cierto es que, según parece, la actuación de un solo trabajador de Societé Generale -uno de los mayores bancos de Francia- ha desencadenado uno de los peores días en la economía de las últimas décadas. Entró en el sistema sin estar autorizado y realizó operaciones para las que no tenía permiso. El resultado lo conocemos todos porque mucha gente ha perdido grandes cantidades de dinero. La Bolsa es un juego peligroso y todos lo sabemos, pero este tipo de acontecimientos son imposibles de predecir, mucho menos cuando la mano humana se mezcla en ello. También indican que la economía es frágil y que el menor movimiento en cualquier parte del mundo puede desencadenar una crisis que nos afecte a todos por igual, a los que invierten y a los que no. Y, desde luego, cosas que éstas son las que hacen que los comunes mortales ni nos planteemos invertir nuestro dinero -ganado en la mayoría de los casos con el sudor de nuestras frentes- en una auténtica ruleta rusa que puede acabar con todas nuestras ilusiones. No merece la pena el riesgo para lo que se puede ganar y al que le parezca que sí tiene que estar dispuesto a perderlo todo. Aunque bueno, ayer nuestro ahow-presi, Revilla, dijo en Buenafuente que la clave para invertir en Bolsa es tener paciencia, según él a largo plazo: no te harás rico pero tendrás unos ahorrillos.
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2 comentarios:
Esta entrada no la veo yo interesante pero bueno. En la bolsa, como dijo ayer Revilla en Buenafuente, hay que saber que a lo corto se pierde siempre y a la larga se gana siempre. Es así de sencillo, la gente de a pie no se va a hacer millonaria con ello pero si tiene dos dedos de frente sabrá sacarse unas pelillas.
Es inconcebible que hoy en día una sola persona pueda organizar semejante catástrofe mundial... o a lo mejor es eso lo que nos quieren contar, porque cuesta hasta creerlo. Pero ¿En manos de quién estamos? ¿y si esto lo hace alguien con más mala leche aun?
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