Las hemerotecas pueden llegar a ser verdaderamente tercas y no se debe escupir nunca hacia arriba porque nos caerá encima con probabilidad. Todo esto viene a cuento porque el TSJC (Tribunal Superior de Justicia de Cantabria) ha visto indicios de delitos de obstrucción a la Justicia -dos- y de prevaricación, para los que cita a Javier del Olmo, consejero de Industria, como imputado. Revilluca dijo el 13 de noviembre de 1991, según El Mundo en Cantabria, que "al frente de la región no pueden estar presuntos delincuentes". Se refería al ex presidente Juan Hormaechea. Sin embargo, ahora dice sobre el caso de del Olmo que "yo no condeno hasta que no lo hagan los jueces". Es impresionante la doble vara de medir que tienen algunos y, en este caso, los señores Revilla y Gorostiaga, según les vaya en la verbena. Todos sabemos que en este bendito país no dimite nadie por nada, pero es que hasta Jaime Blanco, senador e histórico militante socialista, le ha pedido a del Olmo que dimita por el bien del Gobierno y del PSC PSOE y para no dar oportunidades al PP. Lógico, pero me temo que no lo va a hacer y esto va a seguir suponiendo un desgaste evidente para ellos. ¿Y qué pasará si le condena la Justicia? ¿Seguirán escondiendo la cabeza en el suelo para que parezca que no pasa nada? En esto de la política todos deberían ser como la mujer del César, que además de ser honrada tenía que parecerlo.
martes, 20 de mayo de 2008
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2 comentarios:
Es importante saber adaptarse ya sea rectificando o mintiendo. Lo principal es embaucar al vulgo y, como cada vez es más tonto, cada vez es más facil pillarles.
En este país es increible lo bien que funciona la ley del embudo lo ancho pa mi y lo estrecho pa tu culo.
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