"¿Imaginas una tarjeta GRATUITA que te dé puntos por tus compras de siempre y para tus compras de siempre? ¡Ahora ya es realidad!"
Así nos intentaban vender una patochada más para promocionar el comerio de Cantabria. Pues bien, en los últimos días me han llegado noticias de esta gran apuesta de Ángel Agudo, consejero de Economía del Gobierno de Cantabria. La tarjeta mágica parece que no lo es tanto y se va confirmando a cada información que me llega. Todas de primera mano, claro.
Así nos intentaban vender una patochada más para promocionar el comerio de Cantabria. Pues bien, en los últimos días me han llegado noticias de esta gran apuesta de Ángel Agudo, consejero de Economía del Gobierno de Cantabria. La tarjeta mágica parece que no lo es tanto y se va confirmando a cada información que me llega. Todas de primera mano, claro.
La última es que en varios comercios de la ciudad sus trabajadores, supuestamente bajo orden directa del jefe de los mismos, no pasan ni una sola de estas tarjeta de Caja Cantabria por el TPV de la entidad, sino que lo hacen por los terminales de otros bancos, aún pagando un poco más por la transacción. ¿El motivo? única y exclusivamente evitar dar puntos a sus clientes, ya que las empresas tienen que pagar a final de mes en función de los que hayan regalado.
Y esto se debe, entre otras cosas, a que los clientes no se preocupan de que pasen su tarjeta de la Caja por su correspondiente TPV, dando por hecho que los comercios adheridos realizarán la operación necesaria y los puntos serán ingresados en sus tarjetas. Pero nada más lejos de la realidad, así que, todos los que tengáis esta tarjeta y algún interés en sumar los puntos ofertados, estad pendientes de la transacción e insistid en que se haga por el terminal correspondiente a vuestra caja.
Y esto se debe, entre otras cosas, a que los clientes no se preocupan de que pasen su tarjeta de la Caja por su correspondiente TPV, dando por hecho que los comercios adheridos realizarán la operación necesaria y los puntos serán ingresados en sus tarjetas. Pero nada más lejos de la realidad, así que, todos los que tengáis esta tarjeta y algún interés en sumar los puntos ofertados, estad pendientes de la transacción e insistid en que se haga por el terminal correspondiente a vuestra caja.
En fin, lo que hay que hacer para ganar baratijas, tanto afán en fidelizar a la clientela y creen que lo van a conseguir dando 3 puntos por cada euro (al cambio queda un mísero céntimo por punto, lo que supone que si se hace una compra de 1.000 euros corresponden unos 30 -en función de la tienda-). ¿Impresionante regalo, verdad? De todos modos, viendo cómo funcionan esto de las tarjetas y el escaso interés de los comerciantes en cumplir lo prometido, más le valdría a todo aquel que es poseedor de una de estas tarjetas inservibles pasar del tema o hacerse alguna de esas de gasolineras o de comercios más serios que se ajustan a lo que ofrecen (aunque las recompensas no sean para tirar cohetes, al menos en otras no les toman por tontos como en ésta).
4 comentarios:
Jajaja, el problema es real, una amiga tuvo que pedir que se lo pasaran por el TPV ese porque se lo querían pasar por otro. De todos modos ¿3 centimos por un euro? Sale mejor la tarjeta del Carrefour, esos sí que saben cóm ofidelizar, los comerciantes del centro deberían aprender de estas superficies a las que tanto asco tienen (por el miedo que les dan, no por otra cosa) porque son mucho mejores que ellos, en servicios y en trato, y eso sí que es triste.
Quisiera llamar la atención sobre una de las ultimas intervenciones en materia de lo que nuestra inoperante clase politica denomina "apoyo al comercio". Me refiero a la campaña denominada "COMERCIO CANTABRIA" orquestada (con mas picaresca que efectividad) por la Consejeria de Economia y Hacienda y la sagrada Caja Cantabria. El programa puesto en marcha con una costosa campaña de publicidad "supuestamente creativa" (de esas que presentan de forma sugerente una ambigua idea --en este caso cuestionaban al espectador sobre un concepto: la fidelidad-- para sorprender posteriormente con el concepto real) consistia en un programa de compras con tarjetas adornadas con ventajas, puntos, descuentos y demas.
El Sr. Agudo se jactaba en un periodico regional (cito literalmente): que "un mes después de comenzar, Comercio Cantabria tiene ya 215.000 socios" llegando a presentar como exito de la iniciativa las "18.000 compras realizadas".
La picaresca es la siguiente: Todos los clientes de Caja Cantabria hemos recibido la tarjeta en nuestro domicilio y no solo eso si no que nuestra tarjeta (con la que operamos habitualmente) ha sido asociada a la iniciativa. Con lo que los supuestos 215.000 "abonados" a la iniciativa no lo somos voluntariamente si no que nos han inscrito "de oficio". El Sr. Agudo debería explicar si esas 18.000 compras han sido nuevas compras via web o son las habituales de los comercios pero ahora maquilladas dentro de la iniciativa.
Lamentablemente, con los ultimos datos (malos) aportados por la Cámara de Comercio sobre indice de ventas, el Sr. Agudo y toda su corte de estomagos agradecidos que han tolerado esta metedura de pata deberian explicar esa supuesta "nueva bolsa de comercio" de la han estado jactandose hasta ahora o por lo menos reconocer el error y tambian las siniestras vicisitudes que han rodeado la puesta en marcha de este innecesario programa.
Por supuesto me he dado de baja.
table actuacion de los comerciantes del centro de Satander, luego lloraran porque pierden clientes año a año. Lo que me sorprende es que se puedan llegar a extrañar de que la gente cada vez compre menos en estas tienduchas.
Deberimos darnos todos de baja de la tarjeta de fidelizacion, creo recordar qeu me llego una carta por si queria adherirme, algo de lo que, por supuesto, no tenia la mas minima intencion. Mi sorpresa llego cuando fui a realizar un iingreso y descubri que ellos, por su maom ayor, habian decidido adherirme la tarjeta a su maravilloso timo de fidelizacion.
Por supuesto, ya me he dado de baja y creo que es lo que debería hacer todo el mundo, aunque solo fuera por el mero hecho de decidir por nootros cuando les conviene. ¿A que nadie le apunta voluntariamente para algo que le beneficie directamente? A mi esta entidad nunca me ha movido el dinero a un plazo con más interes, es más, ni siquiera me ha informado de ello.
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