viernes, 1 de febrero de 2008

Los comerciantes están de capa caída

Pues sí, Señores, nuestros queridos comerciantes de toda la vida no encuentran motivos para la esperanza. Los datos que ellos mismos aportan al estudio de la Cámara de Comercio sobre su coyuntura son desalentadores. A pesar del redondeo insultantemente alcista cuando se introdujo el euro, nuestros establecimientos se ven acuciados por la crisis. Algunos de los que todavía están al pie del cañón recordarán cuando eran ellos los que establecían las reglas y, por supuesto, los precios. Eran pocos pero también había quienes, además, trataban de manera despótica a los pobres ciudadanos que iban a comprarse un jersey o unos zapatos porque sabían que no irían a otro sitio porque no existía. Poco menos que insultaban cuando veían que alguien osaba entrar en la tienda. Ese Comercio rancio se vio abocado a la venta del local a una franquicia porque, abiertos los centros comerciales, nadie quería entrar donde le tratasen mal si tenía alternativa. Estas grandes superficies les han hecho mucho daño, pero yo creo que el principal se lo han hecho ellos mismos tratando a los consumidores como pobres tontitos sin derechos. Eso sí, han amasado pasta de narices aprovechando aquellos tiempos. El problema viene para sus hijos o para los que han montado el negocio hace poco. Están mejor preparados y atienden mejor, pero la mayoría sigue con tácticas de los años 50. En los centros comerciales devuelven el dinero y no preguntan. A veces, los vales no "valen"...

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Si es que se lo curran ellos solos. En vez de hacer algo util ahora salen con la mierda esa de la tarjeta de fidelidad. ¿No les sería mas provechoso gastarse el dinero en otras iniciativas más productivas o en equiparar sus devoluciones a las grandes superficies?

Anónimo dijo...

Yo en el unico centro que compro ultimamente es en el de Bilbao. La verdad es que el centro de Santander está cada vez peor, los comerciantes siguen subidos a la parra con cosas que, en muchas ocasiones (salvo algunas y a algunos), no valen ni la mitad de lo que piden por ellas así que, entre eso y su amabilidad...

Anónimo dijo...

Pero ¿cómo no van a estar de capa caída con todo lo que han hecho? Esa mala gestión hace que otra cosa fuera inviable, la gente traga con ciertas cosas pero llega un momento en el que se acaba cansando. Es normal.

Anónimo dijo...

La verdad es que nohacen más que quejarse y su unica solucion hasta el momento es meterse en una chorrada de tarjeta que no vale para nada. ¿No sería mejor gastar ese dinero (que es una pasta) en cosas más productivas?