CEOE o la conjura de los necios

Me cuenta un conocido cómo está el patio en CEOE-CEPYME Cantabria, la Patronal de los empresarios en nuestra región -y a nivel nacional-. Hubo elecciones para elegir presidente hace justamente un año. Había dos candidaturas (Mirones -hostelería- y González Cuevas -construcción-) y uno que andaba a su "bola" mirando de dónde podía picar para trincar algo de poder (Gómez Otero -pymes del metal-) se sumó a la lista de Mirones porque parece que le ofrecía algo más pero él quería ser vicepresidente. Mirones ganó y se lo concedió. El tema ahí se quedó aunque González Cuevas no quedó nada satisfecho -lógico, porque había perdido- y siguió moviendo fichas en la sombra y también a la luz pública. Gómez Otero siguió revolviendo desde dentro en busca de más poder, pero nada consiguió, más que armar algo de ruido. Poco después de las elecciones presenta su dimisión Miguel Ángel Castanedo, el secretario general, por motivos personales -según se dijo-, así que se abría la posibilidad de conseguir un buen puesto para familiares y amigos, y todos se pusieron a moverse. La selección la hacía una empresa privada pero las presiones debieron ser terribles. Entre los que más se movían estaba Gómez Otero, que quería colocar a su hijo como fuera. Al final, el elegido fue Ives Díaz-Villegas, que tiene un currículum impresionante y es una persona preparada para asumir esa responsabilidad. Para Gómez Otero es la gota que colma el vaso y se lanza, con González Cuevas, a crear una nueva asociación de empresarios, rompiendo con CEOE-CEPYME, aunque queriendo negociar la concertación social, lo que van a tener bastante crudo, por cierto. Han dado datos que no se ajustan demasiado a la realidad y este follón les va a suponer convertirse en unos "apestados" en el mundo de la empresa en Cantabria. Así funcionan algunos, como Bruto, que no tuvo inconveniente en apuñalar a su padre adoptivo Julio César.