Ya vamos por la tercera parte de esta saga que amenaza con convertirse en serial barato. Ayer salía el consejero de Economía y Hacienda acompañado de su cuñado, el director general de Comercio, en el establecimiento "Gables", de la calle Juan de Herrera porque, casualidades de la vida, éste había tenido la gran "fortuna" de ser el número 1.000 en apuntarse a la súpermegachachipiruli campaña. Agudo, Toyos y el otro "chupándose" mutuamente las pollas y hablando maravillas de este engendro que nos va a salir muy caro a todos los cántabros, empezando por los comerciantes. Rascando un poco más y moviendo hilos he descubierto un par de cosas muy interesantes. Primera: Empleados de Caja Cantabria van "metiendo por los ojos" el ordenador cutre a los comercios con cuenta en la entidad, incluso a los que no tienen TPV (Terminal Punto de Venta). ¿Cómo es posible pagar con tarjeta en un sitio que no tiene para pasar la misma? Segunda: Se crea la Fundación Comercio Cantabria para no tener que rendir cuentas a nadie, ni oposición ni ciudadanos ni empresas de publicidad. Designaciones a dedapio y punto. Fraile y Blanco todavía se está frotando las manos. Y tercera -y más grave-: La pasta asignada (mucha) no llega, así que desde la Consejería han aprobado una nueva partida por un valor que desconozco pero que se hará efectiva en enero, en los presupuestos generales de Cantabria. ¿Cómo es esto posible? ¿Qué pasa aquí para que haya tanto empeño en potenciar algo que se ve que no va a ningún lado? Y cuarto: Menos mal que regalaron las entradas para el concierto de Pasión Vega y Mónica Molina, porque eso de 200.000 titulares de tarjeta no se lo cree absolutamente nadie.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
5 comentarios:
Vergonzoso en lo que se va el dinero de Cantabria...Vaya ciudad de chichinabo que tenéis, no sé cómo no os da vergüenza ser partícipes de este tipo de estafa.
No sé por qué le has cogido esa inquina a la Caja con ese tema, esto no es de la Obra Social, es una trabajo desde la dirección de Negocio, vamos, que nada de buenas obras, aquí la Caja busca dinero (y no hace mal). En esta historia, que tiene mucho de despropósito, los que se equivocan son los políticos que sí tienen que buscar el bien común.
Y así a ojo no creo que la caja tenga 200.000 titulares de tarjetas aunque sí que tendrá 200.000 plásticos activos, ya sabemos que somos multitud los que llevamos la cartera inflada de tarjetas y sin un duro en ella.
Dondado, me da que noes con la Caja esto, me da a mí que es con diseñadores y demás gente, pero no sé yo...
Madre mía... así se va el dinero de la ciudad, luego está como está, que hacen parques sin zonas verdes porque resulta muy costoso mantenerlo.
Vergonzoso no, LAMENTABLE.
No va ni con Caja, ni con los diseñadores ni con nadie. Va con una chapuza que nos va a salir muy cara a todos. Me encanta que lo veáis con tanta tranquilidad pero al despilfarro ya hecho su sumará otro a principios de 2008. Y la crítica va a cualquiera que tenga que ver con este auténtico despropósito público. El que quiera ver otras cosas siento decirle que se equivoca.
Publicar un comentario