El verano se acerca a su fin y en Santander toca Semanuca y mercado medieval. Es una cosa en la que no hemos sido pioneros -¿lo hemos sido en algo?- pero que ha dado un buen resultado porque es agradable y ofrece algo nuevo cada año. En otros 5 igual nos cansamos, pero, de momento, parece que la gente responde, y la prueba es que, ayer, a las 21:30 horas, estaba absolutamente abarrotado. Diferentes tipos de comida, entretenimientos inteligentes -no hace falta consola para divertirse- y puestos con especias, caramelos artesanos, cinturones de cuero, etc. Vamos, una pequeña gozada que rompe la monotonía veraniega de esta bendita ciudad. Eso sí, el Ayuntamiento, para que no nos olvidemos de que está ahí, se ha encargado de poner un sistema de alumbrado de puestos realmente cutre. Cada dos por tres se apagaban las de todos los puestos y al rato, se volvían a encender. Muchos feriantes estaban hasta las narices, porque, lógicamente, pagan religiosamente por vender allí, y se merecen, cómo no, trabajar en las mejores condiciones, ya que si el público no ve lo que venden, difícilmente comprarán algo. ¿Tan difícil es poner los generadores suficientes para que la electricidad soporte el número de puestos total? A mí me parece que no porque se puede calcular el gasto por puesto y multiplicarlo por x feriantes, ¿no? Pues parece que no. A ver si en el Ayuntamiento se hace alguna vez algo completamente bien, y no sólo a medias.
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6 comentarios:
Desde luego a mí es lo que más qme gusta del verano santanderino que, a mi entender, anda bastante escaso de muchas cosas.
Lo de las luces es cierto, los pobres "mercaderes" estaban desesperados porque allí, sin luz, poco se puede hacer. Aunque ahora que lo pienso, como buen mercado del medievo quizá deberían tirar de lámparas más tradicionales.
Jejeje.
Eto del mercado medieval es una idea genial. Lo único que quizás deberían ampliar un poquillo el horario, sobre todo por la noche, que ya que es fin de semana apetece comer algo allí tranquilito antes de salir.
¡¡Qué bonito!! la única pega es que hay cosas bastante carillas y que muchas de las cosas están reservadas casi desde que las colocan en el mostrador. ¡¡TE PONEN LOS DIENTES LARGOS PA NA!! Por lo demás, cahpó, es algo que, sin lugar a dudas, anima el último fin de semana de Agosto.
lo unico que no me gusta del mercado medieval es que solo es un fin de semana, y que es dificil aparcar, como en todo santander. pero me encanta.
saludos
Muy bonito el mercado, para los que no somos espa;oles es algo muy bonito e interesante.
Pues a mí me encanta el mercado medieval, me parece una cosa super bonita y super original. Este tipo de propuestas son las que hay que aplaudir y desde luego se nota que a la gente le gusta (no hay más que ver el ambiente en Los Baños de Ola y el ambiente del mercado medieval...).
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